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Contundentes hallazgos hablan de los incas en Mendoza y Neuquén

María Morinelli
Por María Morinelli
Hallazgos en el sur mendocino y en el centro cordillerano hablan de la presencia incaica en la región.

Nuevos estudios confirman la presencia en el sur mendocino y se suman a lo hallado en la cueva de Haichol, cerca de Las Lajas. ¿El oro, la plata y la sal del norte del Neuquén también fue su objetivo?

Una serie de construcciones en plena cordillera mendocina, que habrían sido para ceremonias y observaciones astronómicas, fue hallado por científicos en la falda sur del volcán Maipo, área natural protegida de Laguna del Diamante. Su arquitectura y desarrollo cultural se corresponden con las realizadas en otros lugares por el pueblo Inca o Tahuantinsuyo, al punto que parecen réplicas en su orientación y forma. Así lo indicaron científicos del Conicet que llegaron y analizaron el lugar.

A estas construcciones se le suman otros hallazgos como el dado encontrado en las cuevas de Haichol, en el centro oeste neuquino, que también se corresponde con los juegos comunes de los Incas. Hasta ahora, el concepto generalizado hablaba de que el imperio con  centro en lo que hoy Perú, llegaba hasta el río Mendoza (donde está el puente natural), más en el centro provincial y a unos 300 kilómetros al norte de Laguna del Diamante.

A partir de lo encontrado, el arqueólogo mendocino Víctor Durán, investigador principal de Conicet y director del Laboratorio de Paleoecología Humana Instituto de Ciencias Básicas de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) y el Conicet, indicó que se continuará con el análisis de algunos aspectos de las construcciones. Entre otras, si en verdad los Incas veneraban de alguna manera a la Laguna Diamante y al volcán Maipo, que se encuentra en el ángulo de visión de lo que sería el espacio más importante del supuesto centro astronómico incaico.

El área no es transitada ya que se encuentra en la zona glaciar de la parte sur del volcán Maipo y su primer descubrimiento correspondió a científicos chilenos que realizaban fotografías del lugar. La altura y la cercanía con el límite chileno son aspectos que también incluyeron en el estudio los arqueólogos argentinos que sumaron a sus pares trasandinos al equipo de investigación.

“Hemos estado mucho allí y ni los guardaparques conocían el lugar, está muy cerca del límite, pero es un área que no se transita, está en la falda Sur del volcán Maipo y no se sube por ahí porque es un glaciar entonces ha sido muy poco transitado”, explicó Durán.

En Neuquén

Hace unos años, en la zona centro oeste neuquina se halló un dado en el interior de las Cuevas de Haichol, en el centro cordillerano neuquino y su análisis se corresponde con los utilizados por los Incas, en un estudio que encabezó el investigador Jorge Fernández y Stella Maris Ferrarese.

El lugar se encuentra cerca de la actual población de Las Lajas, en el oeste cordillerano de esa región, y se abren los estudios del posible contacto entre el sur mendocina y esa zona, por parte del pueblo incaico.

Como en ese espacio, entre las Cuevas de Haichol y la Laguna del Diamante se encuentran las salinas y las minas de oro y plata del norte neuquino, se avanzará a través de especialistas si esos minerales también fueron el objetivo de la presencia del Imperio. Una de las especialistas en el tema aseguró a Pasó Hoy sobre esa posibilidad.

Hasta el momento se sabe que durante todo el siglo XV, el imperio incaico tuvo un hábito de expansión hacia el norte –llegando hasta el sur de Colombia- y hacia el sur, bordeando el océano Pacífico en lo que hoy es Chile con inserciones en la actual Argentina. Estos hallazgos, sumarían nuevos territorios en el extremo austral del Tahuantinsuyo.

ATE
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Periodista, docente e investigadora. Vive en la Comarca Andina de Río Negro y Chubut.
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