Cerca del muelle del Lago del Desierto, una alianza de oro encandiló a Marcos Ponce que se sumergió para sacarla. A partir de allí, el impacto del destino en las protagonistas de esta historia.
Hace exactamente un año el buzo Marcos Ponce nos contaba desde Esquel que al fin había encontrado a la dueña de la alianza que rescató en el fondo del Lago del Desierto, en Santa Cruz. En aquella charla no sólo surgió una historia de amor sino el compromiso de Ponce por volver a su dueña ese anillo y agradecer a quienes multiplicamos el mensaje de búsqueda.
Ponce, que también es fotógrafo y difunde sus experiencias bajo el agua en toda la Patagonia, emprendió hace un año un viaje con su familia desde Esquel hasta Ushuaia y en su regreso, tras pasar por El Chaltén “uno de los lugares icónicos que yo quería bucear era el Lago del Desierto. Y digo icónico porque ese lago estuvo en disputa en la década del 70 con Chile por la cuestión limítrofe y buscaba como un humilde acto de soberanía, conocer el fondo buceando allí”, contó.
“Pero nunca pensé en encontrarme con la historia que me encontré”, confesó. Junto a Hugo Bottaro, otro buzo apasionado como Ponce, el 17 de marzo realizaron la inmersión con la idea de recorrerlo en su profundidad “y sacar fotografías para divulgar el lugar”.
Terminando el buceo, ya de regreso, saca fotos del muelle y “un brillo en el fondo me llamó la atención, al punto que casi me molestaba para sacar las fotos. Miré y me pareció una argolla y me sumergí para rescatarla”. Luego la limpió y observó que se trataba de una alianza, presuntamente de mujer por el tamaño, que tenía una inscripción con la fecha 21 de marzo, un apellido y el clásico 18K de las alhajas elaboradas con oro.
Recién en abril del año pasado, Ponce pudo comenzar con su objetivo de juntar a su dueña con la alianza y publicó la búsqueda con esos datos que se observaban en el anillo. Rápidamente se compartió la publicación “fue impresionante, a las tres horas se había multiplicado casi tres mil veces y me llega un mensaje por Messenger de una chica de Río Turbio que me indica que ella podía ser la dueña. Yo expresamente omití en la publicación el dato del año que estaba grabado para que quien dijera ser dueño o dueña me lo corroborara para saber que realmente era su propietario o propietaria”.
La chica de Río Turbio le confirmó que la fecha era la que estaba tallada “y me cuenta una historia que es cuando esto comienza a tomar una envergadura que no imaginaba”. Ella muy emocionada en ese momento, le comentó a Ponce que la fecha del anillo era el aniversario de compromiso de ellas que habían tenido una relación de varios años tras conocerse en el sur del país, pero que luego deciden separarse y una de ellas retorna a su lugar de origen en la provincia de Buenos Aires.
Con la idea de cerrar ese ciclo de amor en su vida, en una visita al Lago del Desierto, arroja la alianza al agua, desde el muelle. “Ella estaba muy emocionada cuando me contacta por primera vez –agregó Ponce- y me dice que esa conmoción es porque el último pensamiento que tuvo antes de arrojar el anillo fue que si el destino lo quiere, esto va a volver a mí”.
Luego de esa conversión, a las tres horas, se contacta también desde Buenos Aires la otra chica que formó aquella relación y además de agradecerle se asombra de todas las situaciones que se dieron para que esa alianza saliera a la superficie a través de aquel buceo “y lo que es la fuerza del destino”.
Ayer el propio Ponce volvió a publicar el recuerdo de lo vivido hace un año: «Historia de buceo, anillo y casamiento!! Hace ya un año que tomaba estado público esta historia que arrancó allá por marzo de 2022 con el hallazgo casual de una alianza en el Lago del Desierto mientras buceábamos con mi amigo Hugo (Bottaro) en un viaje familiar y por aquellas latitudes….
En Abril del mismo año decidí publicar en las redes la búsqueda de su dueño o dueña y luego vino lo que es historia conocida: la viralización, contacto de la dueña del anillo, luego de su ex pareja, conocer una historia de amor trunca hasta ese momento, las publicaciones por distintos medios primero nacionales, luego locales y hasta internacionales en TeleCinco de España y DailyMail del Reino Unido, entre otros….
Pasado un tiempo, la alegría de saber que volvían a encontrarse y como culmine de ello, en Julio pasado el casamiento de Daiana y Ayelén, cerrando de esta manera una historia de amor con el mejor final… y una amistad con ellas que hoy perdura…
Soy un agradecido, el buceo me regaló en todo este tiempo infinidad de alegrías y momentos únicos, pero sin dudas esta será una historia difícil de olvidar…”.
Nueve años pasaron desde que una alianza de oro testimonió el compromiso entre ellas y en ese tiempo, la ruptura de la pareja, el anillo que cae por un tiempo al fondo del Lago del Desierto hasta que es rescatado por el buzo, puesto a recorrer kilómetros a través de las redes virtuales, impacta con la terquedad del destino a las dos mujeres y las vuelve a unir en una vida actual en el extremo suroeste de la provincia de Santa Cruz.