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La magia de las ventanas patagónicas

Diego Promenzio
Por Diego Promenzio
¿Qué es más importante: la puerta o la ventana? Gran debate. Aquí mostramos algunas de las ventanas que encontramos en nuestro sur argentino. ¡Sumá la tuya!

Hoy quiero contarles sobre un tema que especialmente a mí, por mi condición de arquitecto, me atrapa sobremanera, que son las ventanas y en particular…las patagónicas.

¡Etimológicamente hablando, las palabras Ventana y Viento provienen del latín y tiene el mismo origen “ventus” y vaya si en la Patagonia se unen estas dos…! Viajando por el mundo solía fotografiar ventanas con la idea de que en algún momento haría una especie de cuadro o poster, cosa que por supuesto nunca hice.
Pero la costumbre de fotografiarlas la mantuve y en estos últimos años, en los que he dedicado mis recorridos principalmente a nuestro sur, me he maravillado con ellas. Por eso quise denominar esta nota como LA MAGIA DE LAS VENTANAS PATAGONICAS.

He tenido no pocas discusiones, con varios colegas, porque para mí a diferencia de casi todos ellos, las ventanas son más importantes que las puertas. O al menos interesantes, para no ser tan polémico.

La puerta, aunque significativa también, en definitiva, no es más que un paso efímero, uno entra o sale de un lugar, chau… listo, su uso se limita a unos breves segundos.

Y a mi modesto entender, con una ventana sucede algo muy diferente, no pasa lo mismo, para mi tienen una injerencia mayor en lo que respecta a un espacio habitable, y por diversas razones.

Si uno se encuentra en un ámbito cerrado, además de permitir el acceso de luz, y en general también de aire, elimina la sensación de encierro, permite la recreacion visual en definitiva te conecta con el mundo y si estas del lado exterior…es una invitación a saber que sucede dentro. En mis proyectos como profesional reconozco una mayor dedicación a las ventanas que a las puertas.

En un principio fotografiaba ventanas que eran bellas en sí mismas o que lograban una composición interesante con el conjunto edilicio en el que habían sido proyectadas. Hasta que me empezaron a interesar ya no tanto su arte como si sus HISTORIAS. Y cada vez más me llaman más la atención, aquellas desde donde, o bien se pudo haber observado algo en particular en alguna época particular o bien lo interesante haya sido QUIEN miraba a través de esa ventana.

Quisiera comenzar mostrando una cantidad de aquellas que son arquitectónicamente características de la Patagonia. Las muestro en forma aleatoria, sin demasiados detalles, y sin ningún orden en particular para que las disfrutemos apreciando básicamente sus morfología y colores.

Mayormente de madera sobre muros de chapa o de piedras de la zona y varias de hierro o con rejas. La mayoría generalmente con vidrio repartido, y deduzco ya aquí una primera característica. En la Patagonia, el vidrio repartido en sus inicios quizás respondía más a un problema de logística en el transporte de los vidrios que a la tradición inglesa o europea, aunque seguramente algo de eso también habrá. A principios del siglo pasado transportar vidrios grandes era algo muy difícil y tampoco existían fábricas en el sur. Por ese motivo es que no existen (al menos nunca vi) construcciones antiguas con grandes ventanales o superficies vidriadas algo que ahora cambio mucho y en parte también porque cada vista de la Patagonia es un cuadro en sí mismo. Ahora reina el Paño fijo gigante entre mis colegas arquitectos del sur.

VENTANAS DE LA PATAGONIA
Algunas de las ventanas CON HISTORIA que nos llevan a descubrir sitios interesantes.

Un primer ejemplo, que no destaca por la excelencia en si de las aberturas, podrían ser las del Touring Club, un mítico Bar y Hotel de Trelew, en la provincia del Chubut. Ya entrar en él, en pleno centro, es entrar en contacto con la historia viva de esta ciudad. Toda una institución en la zona, es más que un bar y hotel, es “EL LUGAR”. Don Luis, hijo del dueño original, y propietario actual me contó hace ya varios años, que por aquí pasaron y pasan los hechos más relevantes de la ciudad, se filmaron películas, se reúnen los políticos, y se festejan todo tipo de eventos sociales.

El Bar mantiene la atmósfera y su estilo de principios del siglo pasado. Barra de madera y mármol repleta de bebidas y botellas de todo tipo y varias ya imposibles de conseguir, un gran reloj antiguo que aún funciona. O sea, conserva la esencia de aquellos años pioneros más allá de algún mínimo detalle de modernidad como el wi-fi. El Bar es un museo en sí mismo, ya que está adornado con todo tipo de reliquias además del edificio en sí, mesas, sillas, caja registradora etc. y …SUS VENTANAS ORIGINALES.

Entonces es que, para mí, esos ventanales de hierro con persianas metálicas, con el nombre del Bar, pintado a mano, en una tipografía ya pasada de moda, que dan a la calle, más allá de su simpleza, son justamente una ventana a la historia de la localidad e incluso a la de la Patagonia misma. Sentarse frente a esos vidrios desde los cuales observaron pasar la vida, personajes como Saint Exupéry (quien sabe si no escribió algo allí), o Fangio, o quizás incluso Butch Cassidy o Arturo Illia, entre tantos otros es algo increíble. Vivir ese tipo de situaciones me emocionan. Como cuando hace unos años pude sentarme en el sillón del Perito Moreno en el Museo de La Plata. Imagino que será algo así como para un fanático de autos sentarse en un coche de Fangio.

En mis viajes por Ruta 3, después de hacer noche en Madryn, es una parada obligada desayunar en el Touring Bar y observar la vida cotidiana de Trelew como hicieron esos ilustres personajes. Es más…siempre me siento en la misma mesa, la de la ventana izquierda.

Otro ejemplo son algunas de la Cárcel del Fin del Mundo, actualmente Museo del Presidio, en Ushuaia, cuyo director, el Sr Carlos Vairo, es el gran referente en temas fueguinos. Acá vamos a ver, varios ejemplos, ventanas en anchas paredes, de las celdas hacia el exterior o de las puertas de esas mismas celdas hacia el interior de los pabellones. Son de hierro, fuertes y muy pequeñas, todas, las de las puertas mucho más pequeñas aún. Imaginemos cuantas miradas y sobre todo sueños habrán viajado a través de ellas, incluso se dice que estuvo Gardel allí, un mito que pocos se atreven a discutir aún.

VENTANAS DE LA PATAGONIA

LA TROCHITA, o el Viejo Expreso Patagónico, es un Monumento Histórico Nacional que tiene ventanas en movimiento, ventanas desde donde se aprecian a cada segundo cosas diferentes. Mis favoritas son las de atrás, porque en las curvas cerradas te permiten ver todo el tren y las bocanadas de humo que escupe la locomotora, y ahí es cuando se logran las mejores fotos de la formación. Ni hablar las de los Maquinistas, quienes, más allá de lo sacrificado de su labor, tienen así mismo el privilegio de disfrutar esos increíbles paisajes. Tuve la suerte de haber viajado en dos oportunidades diferentes en la mismísima locomotora y que gentilmente me dejaran por momentos dominar a la bestia y tocar esa bocina tan característica!. Momentos y sensaciones únicas en mi vida.
Para mí, nadie puede decir que conoce la Patagonia si no anduvo en La Trochita.

LA TROCHITA

La siguiente es una ventana de la que seguramente sus visuales fueron fuente de inspiración para uno de las personas más increíbles entre las que habitaron el sector fueguino. Lamentablemente falleció en mayo de 2015, se llamaba Natalie Prosser de Goodall, casada con el bisnieto de Thomas Bridges, quien fue el primer hombre occidental en vivir en Tierra del Fuego y fundador de la Estancia Harberton, la primera estancia en esa provincia (1886). Natalie, fue una bióloga que estudio la flora y fauna fueguina y fundó el “Museo Acatushun” ubicado en la entrada a la estancia. En 2015 durante una visita la vi, desde el exterior de ESA MISMA VENTANA, de marco de madera, simple, sobre pared de revestimiento de chapa, trabajando sobre unos huesos de algún mamífero marino. Pedí hablar con ella y quien gentilmente permitió que nos fotografiemos juntos, incluso abrió los muebles dejando parte de una colección de huesos a la vista, para que “la foto te salga mejor”, me dijo. Me habló sobre su trabajo y sobre bahienses que habían sido becados para trabajar junto a ella.

ESTANCIAS HARBERTON

Bueno el siguiente es un grupo de ventanas a las que podríamos llamar figuritas difíciles de conseguir, y que son las ventanas del Faro San Juan de Salvamento, el verdadero Faro del Fin del Mundo, ubicado en la Isla de los Estados, en la parte este de la Tierra del Fuego.
En enero de 2019 año participé de una expedición a esta mítica isla donde pudimos fundar una biblioteca a la que llamamos Biblioteca «HEROES DE MALVINAS 1982». Imaginemos cuántos navegantes de todo el mundo han visto el océano desde esas diminutas ventanas o incluso a cuantos barcos estas mismas ventanas han ayudado a no naufragar, ya que esas ventanas son el faro mismo, desde ellas se envía la luz del faro a las embarcaciones que navegan cerca de la isla. En sí son ventanas con vidrios fijos, de madera, en muros también de madera. No recuerdo si son 6 u 8 y dan al mar. Incluso la puerta tiene una ventana Ojo de Pez, muy bonita. Además, y por si fuera poco…son ventanas que están descriptas en uno de los libros más vendidos de la historia como es EL FARO DEL FIN DEL MUNDO de Julio Verne. Vale la aclaración que el faro actual es una réplica no tan exacta del original como si lo es la que se encuentra en el Museo del Presidio.

VENTANAS PATAGONICAS

Otra figurita difícil es la foto de una ventana muy especial para mí como lo es la de la “Biblioteca Península Haush” la cual fundamos en enero de 2022 junto a mí hermano Fernando, mi sobrino Bruno y un grupo de amigos mayormente fueguinos, en el mítico Refugio de Puerto Español. Llegar allí es muy complicado, sólo se accede en velero. La alternativa es caminar cerca de 100 kms atravesando ríos, turbas, bosques y montañas de la mágica península Mitre, en el último confín de la Tierra del Fuego. En la primera mitad del siglo pasado hubo un intento de colonización del cual aún se pueden ver vestigios. La “Biblioteca Península Haush”, por razones de logísticas, se trasladará próximamente al Destacamento Naval “Luis Piedrabuena” en Puerto Parry, Isla de los Estados.

PENINSULA MITRE

Unas ventanas que a mí me encantan en cuanto a la arquitectura se refiere son las de la Estación de Ferrocarril de Puerto Deseado, uno de los edificios más hermosos de la Patagonia sin dudas. Estación punta de riel del ferrocarril que debería haber llegado a Bariloche y finalmente quedó trunco en Las Heras. Un ferrocarril considerado de fomento, con la intención de estimular el desarrollo del territorio de la Patagonia, a partir del boom lanero en la región. Entró en funcionamiento en 1915.

 El edificio es de piedra y fue construido por un grupo de inmigrantes yugoslavos convocados especialmente para esa tarea. Las ventanas son de madera y verticales, tal el estilo de la época. También claro, con vidrios repartidos. Desde esos mismos vidrios que protegían del riguroso clima tanta gente habrá mirado la hermosa ría de Deseado o hacia el otro lado la torre de la Iglesia y su increíble campanario.

Otro sitio legendario de la Patagonia es el Parador La Leona, un oasis en la RN40 entre Calafate y El Chaltén. Fundado en 1884 por una familia dinamarquesa en el mismo sitio donde pocos años antes el Perito Moreno había sido atacado por una puma, (leona para los lugareños). Siempre hago una parada allí, el lugar conserva esa mística de antaño y sus dueños pueden contarte historias de personajes que anduvieron por allí, como Butch Cassidy, Sundance Kid y Ethel Place, luego de robar un banco en Río Gallegos o el famoso bandolero uruguayo, Asensio Brunel.

PARADOR LA LEONA

Puedo asegurarles, que, de los boliches más viejos de la Patagonia, el más encantador por su arquitectura y estilo es el bar “Los Muchachos”. Se lo puede encontrar a media cuadra de la plaza principal de un tan hermoso como desconocido pueblo llamado Río Pico, en el sur oeste de Chubut. Rio Pico, un lugar muy apacible y que bien vale una visita. Cercano a Gdor. Costa y el hermoso Lago Vinter.

Se construyó a fines de la década del 30 con paredes de caña y barro, con un sistema llamado “pared francesa”. El piso es de madera, al igual que las tejuelas del techo, y curiosamente no tiene cimientos, esta como apoyado en el piso, por lo cual la estructura está bastante deteriorada.

¿Por qué elegí esta ventana para mostrarles? Cuando lo conocí en 2016, estaba cerrado ya hacía casi 10 años según me contó la gente de la oficina de turismo. Sus ventanas cerradas, casi tapiadas, la verdad, invitaban a husmear un poco lo que había adentro. Y como viajero curioso…y ante la imposibilidad de entrar…disparé mi cámara con flash por un pequeño agujero en el vidrio de una de las ventanas. Y la verdad me llevé una gran sorpresa, el bar parecía detenido en el tiempo, estaba todo casi tal cual lo dejaron probablemente la última noche que abrió. No viene al caso pero en ellas se veía todo cubierto de polvo el amoblamiento típico de un bar del siglo pasado. La mesa de villar con los tacos arriba de ella, el metegol, mesas, sillas, mostrador y muebles de madera, el poster de Maradona, una salamandra, vasos y algunas viejas botellas de ginebra.

“Los Muchachos” es el bar histórico del pueblo, donde se hacían los bailes de Carnaval, los cumpleaños y casamientos. Donde se bailaba tango, pasodoble y foxtrot. El público se reunía a jugar al mus, truco, pool y al metegol, y a veces guitarreada, claro.

BAR LOS MUCHACHOS, RIO PICO, CHUBUT

Los Invito a todos a subir en los comentarios, fotos de ventanas patagónicas (o no) que les haya resultado interesantes por algún motivo.

¡¡Hasta la próxima amigos…!!

ATE
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Arquitecto, bahiense y apasionado por los viajes, la naturaleza y la fotografía. Ha recorrido varias veces toda la Patagonia. Fue el creador del espacio Fotos con Historia que se emitió por la radio AM 550 y el canal 24/7 Noticias de Neuquén. Fundó una biblioteca en el Faro del Fin del Mundo en la Isla de los Estados ya partir de esa idea impulsa y dirige el proyecto “Sembrando Bibliotecas” que tiene el objetivo de fundar una biblioteca en cada provincia argentina. (https://www.facebook.com/proyectosembrandobibliotecas/) Además, tiene un canal de Youtube (https://www.youtube.com/@fotosconhistoria-diegoprom7270/) donde se pueden ver los videos con los relatos de viajes por la Patagonia y el mundo.
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