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La mujer que vive en un velero hace 23 años

Vanesa Mrozowski
Por Vanesa Mrozowski
Es impactante la opción de vida de esta mujer, que anda sola por el mundo, en su casa "Acuarela", en su amor: el mar

Su casa es el mar de la Patagonia, de Brasil, del Caribe. En una embarcación de poco más de seis metros de largo, navega la vida. Conocela en esta entrega de El Diario de Vanesa.

Conocer y disfrutar la pasión de Chris Amaral, la mujer que vive en un velero desde hace 23 años, es un antes y un después. Como fue en su vida el momento en que  decidió subirse al “Acuarela” y zarpar hacia los mares del mundo. Allí decidió que esa sería su casa, que las olas serían su suelo y el horizonte una llave para una experiencia inédita cada día.

Llegamos a su velero en una charla junto al periodista Marcelo Castro, en nuestro ciclo de El Diario de Vanesa, en Viaje al puerto de la noche. Y vaya que fue un viaje, porque estar a bordo de la vida de Chris es verdaderamente surcar los mares de una opción de vida, sin igual.

Está enamorada de los mares y las costas patagónicas, ha estado varias veces, llegando a cruzar el Estrecho de Magallanes hasta anclar en el Canal de Beagle, en Ushuaia.

La viajera solitaria, pero también la mujer que se fortalece con una opción de vida que tomó hace 23 años en su Brasil. «Me fui a los treinta y cinco y dejé toda la seguridad, comodidad y estabilidad de una buena vida en tierra y me fui a vivir a un pequeño velero (6.5m), sin motor, sin baño pero con vista permanente, balcón de 360 grados, y piscina infinity edge, mi un gran objeto de deseo”, dice en medio de una sonrisa que no para, como el movimiento hacia el horizonte que siempre plantea el mar.

En esta navegación de 23 años “he trabajado en este medio náutico durante muchos años y aprendí a lidiar con lo desconocido e inestabilidad, las condiciones financieras y climáticas: hoy estoy más sensible al notar los sutiles cambios de temperatura, corrientes, presión atmosférica, humedad, vientos, nubes”.

Se puede decir que Río de Janeiro es su punto de salida y de llegada, aunque en estos 23 años de viajes, cada lugar lo hizo suyo, se quedó allí en los afectos y en los recuerdos, y volverá a salir y llegar. Especialmente esos lugares que más la impactaron, como toda la costa patagónica, el Estrecho de Magallanes con sus historias y vientos, la Península Mitre, Ushuaia.

No cree que en algún momento pueda “aterrizar” definitivamente en un suelo firme, cree que ya el agua forma parte de su vida cotidiana y difícilmente la pueda cambiar.

Una charla apasionante que dejamos aquí para compartir. ¡Será hasta la próxima edición de El Diario de Vanesa!

ATE
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Deportista, empresaria de traslado de mascotas en todo el país y comunicadora aficionada, creó y conduce el espacio El Diario de Vanesa. Vive en El Calafate, Santa Cruz.
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