Este fin de semana, la localidad de Chimpay se convierte en el epicentro de una de las manifestaciones de fe más profundas de la Patagonia argentina, mientras cientos de peregrinos se acercan para rendir homenaje a Ceferino Namuncurá en el 148° aniversario de su nacimiento.
Conscientes de la magnitud de este evento, las autoridades de Río Negro pusieron en marcha un riguroso operativo de seguridad que comenzó el viernes 24 de agosto y se extenderá hasta el lunes 26.
El operativo, coordinado por la policía de Río Negro, cuenta con la participación activa de efectivos de la Regional Cuarta de Choele Choel y personal de seguridad vial, quienes se han distribuido en puntos estratégicos a lo largo de las rutas y caminos del Valle Medio. Estos controles no solo buscan asegurar un tránsito fluido y seguro, sino también brindar acompañamiento a los peregrinos que llegan de diversas formas: en vehículos, bicicletas, a pie e incluso a caballo.
Cada año, esta peregrinación es un testimonio del fervor y la fe de los devotos de Ceferino Namuncurá, quienes acuden a Chimpay no solo para conmemorar su natalicio, sino también para pedir su intercesión en diversas causas. Desde solicitudes de salud hasta la solución de problemas económicos y situaciones desesperadas, Ceferino es venerado como un «santo milagroso», capaz de conceder las gracias más difíciles. La peregrinación, que muchos realizan como cumplimiento de promesas, es una expresión de esperanza y devoción inquebrantable.
Las celebraciones en honor a Ceferino Namuncurá no solo reflejan la fuerza de la devoción popular en la región, sino también el compromiso de las autoridades en preservar la seguridad y el orden durante uno de los eventos religiosos más significativos de la Patagonia. Mientras los peregrinos avanzan hacia Chimpay, llevan consigo no solo sus peticiones, sino también la fe en un beato que, año tras año, sigue siendo un faro espiritual para miles de argentinos.