Un explosivo fue encontrado en el patio de la Comisaría 10° de Rosario el martes por la noche, lo que generó un fuerte operativo de seguridad. Como medida preventiva, las autoridades trasladaron a 62 internos a diferentes cárceles para evitar riesgos.
La granada Fmk2, hallada sin el tren de fuego y por lo tanto inactiva, no representaba peligro, según informaron las autoridades. Aunque se había especulado que el artefacto había sido arrojado desde el exterior, se investiga la posibilidad de que haya sido un preso quien la introdujo.
Mientras tanto, algunos familiares aprovecharon la oportunidad para denunciar las condiciones de hacinamiento en la comisaría, que alberga a 62 presos cuando su capacidad es solo para 20 internos. Las quejas se sumaron a las tensiones generadas por el hallazgo del explosivo.