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Son de Neuquén y Plottier y están en el Plan Espacial Argentino

Sergio Sarachu
Por Sergio Sarachu
Hombres y mujeres de nuestra región participan de la elaboración de vehículos lanzadores de satélites, como lo hicieron con los SAOCOM 1A y 1B.

Una cadena de empresas públicas y privadas forma parte de los objetivos entre los que se cuentan el lanzamiento de satélites desde nuestro país.

Hombres y mujeres de distinta formación académica forman parte en todo el país de empresas públicas y privadas que están tras el objetivo de lanzar satélites propios desde nuestro país, en un recorrido histórico que tuvo la Argentina en la carrera espacial. No sólo la construcción de satélites como los Saocom 1A y 1B que están en órbita enviando información, sino además que nuestro país tenga su propia base de lanzamientos y la autonomía y prestigio que ello significa.

En ese ambicioso plan espacial argentino, el neuquino egresado de la Universidad de La Plata en Ingeniería Electrónica y especializado en Telecomunicaciones Lautaro Lorenzen, forma parte de la empresa Veng. La firma de base tecnológica ofrece “a la industria espacial y a la industria consumidora de alta tecnología en general, servicios de ingeniería y fabricaciones orientados a la solución de problemas complejos”, además de ser la empresa autorizada por la Comisión Nacional de Energía (CONAE) para la distribución de las imágenes que envían esos satélites, en los que también trabajaron.

Además del neuquino, está en la propia CONAE la licenciada en  Geografía y Magister en Aplicaciones de la Información Espacial (Universidad Nacional de Córdoba), Romina Solorza. Nacida en Plottier, ingresó en la Comisión como becaria, luego se formó en el área Espacial en Italia e ingresó en el proyecto Saocom desde sus inicios, en 2012.

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En esa cadena de empresas públicas y privadas convocadas en el Plan Espacial Argentino, también se encuentran universidades como la de Mar del Plata. Desde allí hablamos con el ingeniero Exequiel Rodríguez, del Instituto de Investigaciones en Ciencia y Tecnología de Materiales (Intema), abocado con su equipo al desarrollo de materiales para los tanques de combustible de los vehículos o cohetes de lanzamiento como el Tronador II, que pondrá en órbita la Argentina desde nuestro país.

La entrevista realizada en directo desde Mar del Plata, el año pasado.

Otro tanto se realiza en la usina de conocimiento y desarrollo ubicada en la rionegrina Bariloche, adonde se terminó de ensamblar cada uno de los Saocom y adonde confluye la ciencia, la industria y la nanotecnología, entre otras disciplinas.

A mediados de junio de este 2023, la CONAE anunció un avance en el desarrollo del primer prototipo de un tanque para el Tronador II- 250. «Lo que el otro día se anunció fue un hito sobre la obra del Tronador. El hito fue que se construyó por primera vez un tanque para el Tronador II-250, que es un tanque de dos metros y medio, por eso se llama ‘250’, porque los vehículos están nominados a partir del diámetro. En la actualidad, además de haber logrado el tanque de este prototipo, también estamos trabajando en el desarrollo de la propulsión de la segunda etapa del 250 y estamos pasando por diferentes prototipos que estamos ensayando», el ingeniero Daniel Rocca, gerente de Acceso al Espacio de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE).

El primer Tronador II-70, se lanzará en el 2026 desde la base espacial que Argentina tiene en Punta Indio, provincia de Buenos Aires, a unos 20 kilómetros de Pipinas. El desarrollo y fabricación del Tronador II forma parte del programa de Acceso al Espacio de la CONAE que se enmarca en el Plan Espacial Nacional, y tiene por objetivo colocar satélites en órbitas bajas a 600 kilómetros de la Tierra desde el territorio nacional a través de un lanzador desarrollado íntegramente en el país. Cuenta con una inversión total estimada de 450 millones de dólares por parte del Estado Nacional hasta 2030.

También contempla un monto de 9.730 millones de pesos destinados al desarrollo de un prototipo denominado TII-70 y de la infraestructura auxiliar prioritaria.

«La participación de las empresas del sector espacial argentino tiene que incrementar. Pero eso se tiene que dar gradualmente. A diferencia de Estados Unidos, nosotros estamos en esa transición todavía, no tan maduros como ellos u otras potencias que tienen una industria sumamente desarrollada, que pueden tomar un riesgo que hoy acá no es posible», agregó el ingeniero de la CONAE.

ATE
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Periodista y escritor (autor de las novelas "Arde La Colmena" y "Un hijo de tres madres", además de varios libros de poesía. Neuquén. Editor.
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