Luego de la victoria de Javier Milei en las elecciones presidenciales, el comisario Daniel González, jefe de la Unidad 10 de San Antonio Oeste, Río Negro, se ha visto en el centro de un escándalo tras compartir en sus redes sociales un video de un Ford Falcon verde, símbolo de la represión durante la dictadura militar en Argentina, acompañado por una marcha militar y la frase «Que se agarren los chorros, jaja».
Este acto, que es interpretado como una reivindicación de la dictadura, generó un rechazo generalizado de gran parte de la sociedad. Ante esta situación, el Ministerio de Seguridad y Justicia de Río Negro, liderado por Betiana Minor, tomó medidas disciplinarias contra González. El comisario fue suspendido de manera preventiva y se inició un sumario administrativo en su contra, con la posibilidad de enfrentar sanciones adicionales. La ministra Minor enfatizó que “un funcionario público no puede reivindicar delitos de lesa humanidad”, dejando claro que tales acciones no representan ni al Ministerio ni a la Policía de Río Negro.
La comunidad de San Antonio Oeste, incluyendo al intendente Adrián Casadei y a representantes de distintas fuerzas políticas y sociales, expresaron su repudio, subrayando que los funcionarios públicos, incluyendo a los miembros de las fuerzas de seguridad, deben promover el bienestar y la paz social, y deben rechazar cualquier acción o manifestación que glorifique períodos oscuros de la historia argentina. Los docentes de la Unión de Trabajadores de la Educación (Unter) también se pronunciaron, señalando cómo este tipo de expresiones rememoran los peores momentos de la historia del país y socavan la paz social.
En su defensa, González afirmó ser un fanático de la marca Ford y negó cualquier intención de glorificar la dictadura. Sin embargo, sus explicaciones no atenuaron el impacto de su acción, considerada por muchos como un grave atentado contra el Estado de derecho y la memoria colectiva de nuestro país.
Este incidente destaca la sensibilidad de la sociedad argentina hacia su pasado dictatorial y la importancia de mantener el respeto y la responsabilidad en el uso de las redes sociales, especialmente por parte de funcionarios públicos.