Don Celestino saludó a sus vecinos Riquez, Urbina y Clark. Un nuevo siglo se iniciaría en Río Gallegos y el francés de las historias infinitas era todo un personaje en el naciente territorio santacruceño.
Celestino Bousquet reunía un historial digno de una novela. Había sido el encargado de fundar para Chile la colonia y fuerte militar Puerto Gallegos, en el paraje Killik Aike Sur, tareas que comenzaron en febrero del año 1873.
Bousquet recuerda aún los preparativos y recomendaciones del potentado empresario José Nogueira, aquel que con sólo 35 años de edad ya reuniría más de un millón de hectáreas luego de su casamiento con Sara Braun.
El 18 de febrero zarpa desde Punta Arenas la balandra “Anita” con colonos y soldados encargados de ocupar la ribera sur del Río Gallegos.
Allí emplazan un rancho de adobes que se convertirá en el edificio utilizado por los chilenos en esta ocupación que fue alentada por los funcionarios de la cancillería trasandina.
Pese a que la situación ya había sido definida desde el punto de vista diplomático mediante el reclamo realizado por el embajador argentino Felix Frías a poco de instalarse el fuerte, pero mucho después se le informó a Celestino Bousquet, al retornar a Punta Arenas, que “no era aconsejable volver al puesto avanzado”.
Sin embargo, fueron estableciéndose en forma progresiva distintos inmigrantes que provenían de la cercana región de Magallanes.
La foja de servicios de Bousquet tiene párrafos destacados cuando actuaba a las órdenes del gobierno chileno. En el año 1879, la corbeta peruana Unión arribaba a las aguas del estrecho de Magallanes, con no muy buenas intenciones.
En los inicios del conflicto bélico entre Chile, Perú y Bolivia, el buque de guerra peruano Huáscar, capturó al transporte chileno Rimac, apoderándose de valiosa información que le hizo saber la llegada a través del estrecho de Magallanes de dos cargamentos de armas destinados al ejército chileno.
Se ordenó que la Corbeta Unión se dirigiera de inmediato al sur con el fin de interceptar los vapores con la carga de armamento.
El 15 de agosto de 1879, llegó la nave peruana a Punta Arenas enarbolando bandera francesa, para no despertar sospechas. Luego de haber fondeado bajó un bote realizando varias actividades bélicas que fueron observadas con alarma por los habitantes.
Mientras tanto, el gobernador Carlos Word, comisionó a los vecinos Juan Hurtado, Julio Izarnótegui y Celestino Bousquet, para que viajaran a la Primera Angostura para avisar la situación al vapor Genovés, que traía los pertrechos. Lograron cumplir su cometido luego de cabalgar 17 horas a caballo.
En Punta Arenas, una delegación subió a bordo del barco peruano Unión para presentar a su capitán los reclamos respectivos. Como respuesta de éste, recibieron una orden de “prestarle” a la nave el carbón necesario para su energía. Agregó que si los marinos peruanos que realizarían este abastecimiento eran molestados, el pueblo sería bombardeado hasta reducirlo a cenizas. Además se pidió el suministro de víveres.
La gente, alarmada por el hecho que pudiera repetirse la tragedia del Motín de los Artilleros, huyó hacia el monte, cerrándose además el comercio, quedando las calles solitarias.
El Gobernador Carlos Wood, con el fin de proteger a los habitantes de la Colonia, accedió a las exigencias, de tal forma que la Unión, abastecida de carbón y víveres zarpó del puerto el día 17 de agosto de 1879.
El vapor Genovés, pasado el peligro, arribó a Punta Arenas con su carga bélica, zarpando hacia el norte en octubre, debidamente escoltado por la corbeta O´Higgins y el transporte Amazonas, finalizando así este hecho en las aguas del Estrecho de Magallanes.
En el año 1886, Bousquet se casa en Punta Arenas con la inglesa Emily Maud King, que había llegado a Punta Arenas un año antes y desempeñaba “labores de hogar”, de acuerdo al censo de entonces.
El francés Celestino, emprendedor y aventurero, es citado en libros históricos como baqueano y ganadero en la Argentina, luego de que le fueran otorgadas tierras por parte del gobierno nacional.
Las memorias de Ramón Lista, ex gobernador de Santa Cruz lo ubican el 14 de noviembre de 1888 sirviendole de guía desde Trelew a Río Gallegos. Bousquet traía hasta Río Gallegos 250 yeguarizos, toda una fortuna para la época y era acompañado por un indio campañista, un cabo y dos soldados le servían de apoyo.
También completaba el elenco un afable y culto francés llamado José Monquillot. Así continuaron cabalgando Lista y Bousquet y su grupo hasta el Río Olnie, cruzaron el cerro Ventana, enfilaron a Puerto Santa Cruz y se reencontraron nuevamente.
Diez años después, en 1898, Roberto Payró destacado periodista y escritor porteño a bordo del Transporte Villarino, visita Río Gallegos y realiza un relevamiento de los establecimientos ganaderos.
En esa oportunidad describe en su obra “La Nueva Australia” el potencial de la región y cita al establecimiento de Bousquet con 3 mil animales de hacienda vacuna bravía.
Franceses en la Patagonia
En 1872 llegaron a Magallanes cerca de trescientos franceses procedentes de Montevideo y Buenos Aires. El Ministro de Chile en esta última ciudad, Guillermo Blest Gana, los envió directamente a Viel, quien los acogió con beneplácito.
En su mayoría habían participado en La Commune de París, por lo tanto eran deportados y provenían de un medio urbano. La población de la colonia subió a cerca de 1.145 habitantes.
La identificación de estos ex-communards ( comuneros) es difícil, pues muchos ocultaron su verdadera identidad o alteraron la fecha de su salida para presentarse como simples emigrantes; en todo caso sabemos que en Punta Arenas permanecieron junto al mencionado Celestino Bousquet, Francisco Poivre, Francisco Arnaud, Jorge Méric (estanciero luego e introductor de la ficha salario en sus propiedades) Eduardo Lamiré, Julio Cordonier, Luis Bonvalot, Alfredo Joigneaux, Abel Guillaume y M. Leviniére (descubridor de oro en el Río de las Minas).
Celestino Bousquet el revolucionario en París
Lo más sorprendente de su actuación anterior fue la lucha revolucionaria de Bousquet junto a otros compatriotas en lo que constituyó el primer gobierno proletario en Francia y que terminaría trágicamente, conocida como “La Comuna de París”.
Este es el nombre dado a la primera experiencia histórica de gobierno proletario (de la clase obrera francesa), ocurrido entre el marzo y mayo del año 1871, en Francia. El movimiento que llevó a la formación de la Comuna de Paris, contó además, con la participación de muchos otros estratos sociales y segmentos político-sociales, como la pequeña burguesía francesa, miembros de la Guardia Nacional y partidarios del régimen republicano, proclamada en setiembre del año 1870.
La formacion de la Comuna de Paris se origino durante el desarrollo de la Guerra Franco-Prusiana (guerra del II Imperio Francés contra el Reino de Prusia). Durante la Guerra franco-prusiana, ocurrida entre los años 1870 y 1871, se enfrentaron las fuerzas francesas de Napoleón III contra los soldados prusianos del canciller prusiano Otto Von Bismarck.
La Comuna de Paris, estuvo influenciado por las ideas socialistas, el gobierno del proletariado se instituyó en 1871 y tomó una serie de medidas para formar un poder democrático popular. Entre esas medidas se destacan : La abolición del trabajo nocturno, reducción de la jornada de trabajo, la concesión de pensiones a las viudas y huérfanos de la Guardia Nacional, la separación entre la Iglesia y el Estado, entre otras medidas. Había una expectativa de que el movimiento en Paris (Comuna de Paris) pudiese reunirse con las comunas formadas en Marsella y Lyon, más la derrota ayudó a aislar más la experiencia de Gobierno proletario en París.
La caída del Segundo Imperio Francés de Napoleón III dio lugar a la formación de un gobierno provisional de defensa nacional llamado la «Comuna de Paris». Luego de la firma del Tratado de Frankfurt las tropas francesas serian liberadas y junto a las tropas prusianas reprimirían sangrientamente este gobierno comunista del proletariado. Al terminar la represión en Paris, y tras la caída de Napoleón III, se formaría la Tercera Republica Francesa que se extendería hasta la Segunda Guerra Mundial.
La victoria prusiana en la Batalla de Sedan impuso una serie de obligaciones a los franceses en el Tratado de Frankfurt. En enero del año 1871, se negoció el armisticio que suspendió las operaciones militares; y en el mes siguiente, la Asamblea Nacional, de mayoría conservadora, eligió a Louis Adolphe Thiers como presidente de la Republica francesa. A él le tocaría negociar la rendición francesa y reprimir el gobierno comunero parisino. El Tratado de Frankfurt entre Francia y Prusia estipulaba:
– Cesión de las provincias de Alsacia y Lorena a Prusia
– Pago de una gran indemnización de guerra a favor de Prusia
– Ocupación de Francia por las tropas prusianas hasta el pago de las indemnizaciones.
«Semana Sangrienta»: Fin de la Comuna de París e inicio de la Tercera República Francesa.
En parte, la limitación geográfica del gobierno comunal facilitó la victoria de Thiers. Al mismo tiempo, debemos sumar otros factores: las divisiones políticas dentro del movimiento parisino, la falta de un comando militar, que planificara la defensa ante una eventual invasión, en el gobierno formado en Paris. La experiencia comunal acabó el 28 de mayo, después de siete días de guerra civil, la llamada semana sangrienta.
Thiers negoció con el gobierno de Prusia, en Versalles, una alianza para derrotar al gobierno proletario «Comuna de Paris». A cambio de concesiones para Prusia, el canciller prusiano, Otto Von Bismarck, liberó a presos de guerra para que pudiesen ayudar en el cerco a la ciudad de Paris. Así el 21 de mayo del año 1871, más de 100 mil soldados invadieron la ciudad de Paris. El enfrentamiento dejó más de 20 mil muertos, del lado parisiense, y miles de exiliados en la Guinea Francesa, este fue el saldo de la violenta represión al gobierno socialista de la «Comuna de Paris». El gobierno que sustituiría al II Imperio Francés sería la Tercera Republica Francesa.
Legado e Influencia de la Comuna de Paris
La derrota del gobierno comunal parisiense, primer gobierno proletario del mundo, dejó una profunda reflexión en el campo socialista. Karl Marx y Friedrich Engels produjeron diversos análisis a partir de aquella experiencia. Evidenciaron como, más allá de una guerra civil, el proceso de formación y, principalmente, la derrota de la Comuna de Paris fueron la expresión de una lucha de clases en un país en pleno desarrollo capitalista. Un nuevo gobierno proletario se formaría apenas en 1917; pero, en Rusia (Revolución Rusa de 1917). La derrota de la Comuna de Paris sirvió como antecedente para la revolución de los bolcheviques en Rusia.
Comiendo un cordero al palo y compartiendo con sus amigos Riquez, Urbina y Clark el francés Celestino Bousquet se siente agradecido a esta tierra que me recibió “como a ustedes», dice, haciendo alusión al origen uruguayo, chileno y norteamericano de sus colegas ganaderos.