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Violencia sin fin: balazos y mensajes mafiosos en Rosario, otra vez

Redacción
Por Redacción
Violencia sin fin: balazos y mensajes mafiosos en Rosario, otra vez. Foto: Télam

Desde que el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, declaró la guerra a las bandas narcos la violencia en Rosario no cesa. En este caso, un grupo de delincuentes balearon un colectivo de pasajeros y una estación de servicio de GNC y fuentes policiales confirmaron que se dejaron notas mafiosas destinadas al mandatario.

El primer hecho ocurrió el lunes cerca de las 22.30 de este lunes sobre la calle Winter al 3800, cuando el interno 3582 de la línea urbana que estaba parado fue atacado a tiros.

El primero de los disparos impactó contra el parabrisas y el otro en la parte derecha de la unidad, a la altura de una de las ruedas, aunque no hubo heridos. En el lugar, los peritos hallaron dos vainas servidas y una nota en la que se menciona a Pullaro, consignaron voceros oficiales.

La segunda balacera se registró alrededor de la 1 de la madrugada en una estación de servicios GNC, ubicada en las avenidas 27 de Febrero y Avellaneda.

Según las primeras averiguaciones, personas que se movilizaban en una moto pasaron y dispararon contra el vidriado del Mini Market, tras lo cual arrojaron una nota escrita de contenido mafioso e intimidatorio donde se menciona al gobernador santafesino.

Los peritos contabilizaron en el vidriado del comercio unos seis impactos de bala. El hecho causó pánico entre los empleados y clientes, quienes resultaron ilesos, añadieron los informantes.

Ambos episodios son investigados por la Unidad de Balaceras del Ministerio Público Fiscal (MPF) de Rosario.

Amenazas mafiosas a la familia

Estos hechos se vienen repitiendo casi diariamente y las amenazas al gobernador se acumulan en una pila de papeles sobre el escritorio en su despacho en la Casa de Gobierno de Santa Fe. Es por esto que Pullaro decidió a principios de enero retirar a su familia de la provincia y mudarlas a un lugar seguro.

«Los primeros veinte días dejé a mi familia encerrada en un departamento pequeño, por lo cual no la pasaron bien, y ahora la saqué de la ciudad, porque no creo que tengan que andar con diez personas de custodia permanentemente porque esos recursos se los sacás a la calle. Yo me la aguanto porque sé en lo que me metí y en las acciones que llevamos adelante, pero no le vamos a permitir a los delincuentes que desde la cárcel hagan lo que quieran. No nos van a amedrentar”, mencionó en conferencia de prensa el 8 de enero.

ATE
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